domingo, 15 de abril de 2012

Game over

Este es un desahogo de los "que hacen época".

Hay un tipo de persona, que en mi vida coincide siempre con una mujer, que me desarma completamente solo con mirarme. Y cuando se dirige a mi y me contesta, siempre para replicarme hace que me sienta pequeña e insignificante.

Si me envuelvo en una guerra dialéctica o intento explicar mi postura, mis fundamentos, acabo sintiendo que me he metido solita en una tela de araña, quedando reducida a víctima, contra la pared, sintiendo clavada como una estaca una mirada de repoche que silenciosamente me estampa un sello invisible de pobre ignorante.

Hacen que me sienta juzgada y sentenciada: culpable. Y en esta etapa de mi vida la culpabilidad siempre se enmarca en el mismo entorno: me siento mala madre... me siento la peor madre. (Y curiosamente en mi caso esas personas no son madres).

Me desnudan y zarandean mi alma de tal manera que no tengo recursos para defenderme: no se me ocurren respuestas tajantes ni acertadas, ni tan siquiera medias verdades que sé conllevan medias mentiras pero que se convierten casi en "vitales" para poder seguir mi camino tranquila.

4 comentarios:

  1. pero quién es esa maldita que te hace eso?? mandamela a mí que ya va a ver.
    besos protectores.
    loli.

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    1. Y les hablamos del Continiuum.... verás como huyen....

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  2. Mon, preciosa! Bucea en ti. Tal vez es que no tienes que buscar respuestas, tal vez no tienes que defenderte de los demás.
    Tal vez debas buscar preguntas: porqué me hace daño? porqué me afecta? qué parte de mi sombra es la que acecha y con la que no he conseguido reconciliarme? qué debo resolver de mí misma, de mi pasado?
    Y tal vez, cuando hagas esas preguntas, encuentres respuestas que ni te imaginabas.
    Y tal vez, así mismo, puedas encontrar la libertad interior que te permita sentirte plena sin tener que justificarte ante nadie.
    Un beso, cielo!

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    1. Llevas razón Anuska. No ofende quien quiere sino quien puede. Es trabajo mío encontrar qué me molesta, por qué y buscar ese escudo que me haga grande y fuerte, que me haga segura. Trabajo harto dificil por otro lado, que los entresijos interiores son muchos y variados.

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